De estilo gótico situado en el centro de la villa de Camprodon, es un puente de un solo arco, construido con piedra y de doble pendiente, unido a una torre de defensa, donde se encuentra el antiguo portal de Cerdanya, que durante el siglo XII, según la documentación encontrada, fue lugar de paso obligado para ir a la Cerdanya.
Popularmente denominado “puente romano” o “románico”, se le llama Pont Nou en oposición al Pont Vell (“Puente Viejo”, el de can Carrera), tal como relata la documentación medieval, aunque también se cree que es porque se erigió sobre los restos de uno más antiguo, ya que a consecuencia del terremoto del año 1428 quedó bastante maltrecho y fue totalmente destruido durante la Guerra Civil catalana.
Uno de los paisajes más simbólicos y reconocidos de la villa de Camprodon
